TRATAMIENTO DE LAS HEMORROIDES
Sólo las HEMORROIDES de grado avanzado deben ser intervenidas quirúrgicamente; afortunadamente, la mayoría pueden ser tratadas de manera conservadora bien mediante normas higiénico-dietéticas o tratamientos farmacológicos, bien mediante tratamientos instrumentales.
Entendemos perfectamente que la consulta de síntomas relacionados con el ano, como dolor, sangrado, picor, supuración, bultos, etc., sea difícil para el paciente. Es prioritario en nuestra consulta dar toda la información necesaria para que el miedo al dolor o la vergüenza debida a un pudor mal entendido no impliquen retrasos diagnósticos de patología grave o la necesidad de tratamientos más agresivos al encontrarnos ante casos en estadío más avanzado.
La cirugía ano rectal o proctológica en general y la de las hemorroides en particular tienen adquirida la mala fama de ser de las más dolorosas. Conscientes de ello, en nuestra Unidad se trabaja con el objetivo de desmentir este tópico. Para ello utilizamos la más avanzada tecnología con el criterio que sólo da la experiencia.
TIPOS DE TRATAMIENTO DE LAS HEMORROIDES
Tratamiento Instrumental Conservador
En nuestro centro, la ligadura hemorroidal por banda elástica es el método más utilizado debido a su gran efectividad tanto en el control del sangrado como evitando la exteriorización de las hemorroides. Si a esto se añade que se realiza de manera ambulatoria en la propia consulta, sin que el paciente interrumpa su actividad, hace que este método sea el de elección para las hemorroides no quirúrgicas.
Cirugía mínimamente invasiva
Para la cirugía de las hemorroides ofrecemos la última técnica de desarterializción y reparación rectoanal sin heridas ni extirpación de tejido hemorroidal.
Utilizamos para ello un dispositivo autoiluminado dotado de una ecosonda doppler, que permite localizar las arterias que nutren a las hemorroides mediante ultrasonidos, facilitando así su ligadura o bien la fotocoagulación mediante energía láser en el punto exacto.
Esta disminución del flujo sanguíneo en el canal anal implica la reducción y contracción de los paquetes hemorroidales ya que estamos actuando sobre el origen de la enfermedad hemorroidal evitando además su progresión.
Esta tecnología se utiliza también para reposicionar anatómicamente las hemorroides internas exteriorizadas.
Las ventajas de este método son evidentes:
- Mínimas molestias
- Cirugía sin ingreso
- Rapida recuperación y retorno a la actividad habitual
Cirugía Láser
LÁSER : Es una luz generada artificialmente, que se caracteriza porque sus rayos tienen un solo color, se desplazan todos en la misma dirección y de forma paralela, propiedades que le permiten un brillo de especial intensidad y alta energía que puede concentrarse en un solo punto.
Cuando las hemorroides presentan un componente externo o cutáneo importante, con síntomas inflamatorios frecuentes así como problemas de picor y dificultades para la higiene, es necesaria la extirpación con objeto de eliminar estos síntomas y conseguir el mejor resultado estético.
Para esta cirugía utilizamos un bisturí láser CO2 de última tecnología que nos permite minimizar el daño quirúrgico, combinado cuando la ocasión así lo requiere, por un sellado térmico de vasos sanguíneos que evita el uso de suturas o puntos. Por todo ello, el dolor postoperatorio va a ser sensiblemente inferior, permitiendo el alta hospitalaria en menos de 24 horas.
Estas mismas ventajas de la tecnología láser, en modo ultrapulsado o en modo vaporización, son aplicables a otros diagnósticos frecuentes, como CONDILOMAS anales y vulvares, o excrecencias cutáneas de cualquier tipo.
La vaporización (eliminación) del tejido patológico mediante láser de dióxido de carbono se consigue con una mínima lesión cutánea al ser una luz extremadamente precisa que no destruye el tejido circundante a la lesión, permitiendo así una cicatrización más rápida y estética.
Otras entidades que tratamos:
- Fisura anal
- Fístula – Absceso perianal
- Condiloma acuminado
- Tumoraciones de recto y ano
- Lesiones de causa traumática
- Estenosis anal (estrechamiento)
- Quiste o fístula pilonidal sacrocoxígea
En los últimos años, en proctología del mismo modo que en otros campos de la medicina, se ha evolucionado hacia una menor agresividad obteniendo los mismos o mejores resultados clínicos que antes. Menos dolor postoperatorio, cirugía sin ingreso o de corta estancia implican un índice de satisfacción del paciente más alto.